Golpeando paredes

Ayer por muchas extrañas razones estaba de muy mal humor, muy muy de malas, eso es muy raro en mi, podré ser muy huraño, solitario, errante o lo que quieran pero nunca de malas.
Llevo varios días sin poder dormir como se debe, tengo mucho sueño, pero pongo la cabeza en la almohada y ahí me la paso, dando vueltas, hasta el día siguiente. Ayer me levanté muy cansado, directo a la compu, revisar horarios y encontrarme con que ya no había dos materias que quería, algunos horarios se encimaban y yo empezaba a sentirme como loco.
Me inscribí, cinco materias, dos no se pudieron y otra es imposible, la cual me retrasará otro semestre, como si no fuera suficiente con lo que llevo en la facultad, ya estoy hasta la madre.
Terminó la inscripción y fui a la cocina, no tenía mucha hambre, pero estaba algo cansado, había que comer algo, serví cereal, abro el refri y no había leche. Valió madres. Tenía ganas de golpear la pared, brincar, correr, volar, lo que sea.
Hoy tampoco dormí. Fui a correr y luego a la fac. Encontré un cuate que arregla los problemas de los grupos y me explicó que tenía que llevar. Fui mas tarde y ya no estaban. Esperé, esperé y esperé, no llegaron. Mañana tengo que regresar a entregar esos papeles y esperar que abran el grupo.
Ahora no se que hago escribiendo esto aquí, sigo enojado, venía caminado escuchando la canción que viene abajo, y justo cuando me alcanza la patrulla llego a mi casa; se la pelan, esta vez no me catean.

A golpear paredes!
Kolpez kolpe de Kortatu, justo antes de Negu Gorriak, inviernos crudos, pero estamos en veranos ebrios, aunque no los encuentro, no entiendo que pasa.