Me gusta volar.
A veces puedo elevarme tanto que dejo de escuchar completamente el entorno.
Aunque también me gusta volar físicamente.
Pero tiene sus desventajas: caer.
Todavía no lo domino, sobre todo cuando se te atraviesan mosquitos en el ojo, puertas de vocho, o el piso.
El martes volé. Y caí.
Y casi me parto la madre.
Pero no.
Tengo esa habilidad innata de sobrevivir a mis estupideces, aunque ahora traigo la mano inmovilizada, el primer día fue chistoso, ahora ya no aguanto esta cosa y tenía que tomarme una medicina desde el viernes, pero empezaré mañana.
3 comentarios:
el burrito ciclista?? no manches, de verdad me espanté, pero eres re terco y ni las medicinas te has tomado... maaaal maaal... eso de volar y no escuchar nada suena chido, pero de volar y caerse, está muy feo, cuídese!!! que su corcel se porte bien y lo proteja...
no pude oír la canción, pero la busqué en lo que ya copié de tus cds, y la escuché... besitos y besos en tu mano ;)
Entre la mano y el hombro, querido piroclasto, lo que sea... por favor nunca pases del cuello, zas?
ten mucho cuidado y hazle caso a Ana, hay que cuidarse y tomarse las medicinas jajaja
yo ando hoy en casa, no fui a trabajar porque traigo una gripa y tos de perro jajajaa y haciendo caso de mi doctor me quedé a recuperarme así que haga lo mismo y a volar con cuidado
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